Cuando una pareja plantea su boda, yo creo que muchos piensan, los amigos y fiesta, luego por una razón o por otra, se apunta la vecina de tus padres, el compañero de trabajo de tu futura suegra, etc.. etc... Y al final esa boda intima con amigos y mucha fiesta, se convierte en un bodorrio de 200 invitados, muy divertida también.. no lo voy a negar.
Pero si yo me fuese a casar, no lo dudaría un momento y lo haría como Roberto y Esther, 30 amigos, una casa rural, piscina, cerveza y un fin de semana entero por delante.
Este año he tenido algunas bodas que recordare siempre, esta es una de ellas.
Muchas gracias a los dos por dejarme disfrutar también de vuestra boda.